La mayoría de las personas somos asalariados, trabajamos por un sueldo, cumplimos con nuestro trabajo y lo hacemos en muchos casos por temor a perder el puesto de trabajo o porque no nos queda más remedio para poder sobrevivir. Otras personas en cambio disfrutan de ello.
Hay personas que quieren alcanzar la excelencia laboral y para ello tienen que destacar del resto. En un mundo laboral cada vez más competitivo, es importante adoptar las medidas adecuadas para no pasar desapercibido.
Las claves para llegar a ser el trabajador del año pueden ser de lo más comunes y que algunas veces no tenemos en cuenta.
- Ser puntual es algo de vital importancia, la puntualidad dice mucho de las personas ya que a nadie le gusta estar esperando por otros. Ser puntual es sinónimo de profesionalidad. Tu jefe será el que dicte el ritmo de trabajo por lo que lo más adecuado es hacerle caso. Eso sí, cuando no estamos de acuerdo en algo debemos de hacerlo saber con educación, para valorar otros puntos de vista.
- Un habito de trabajo para ser un buen empleado es el de resolver por sí mismo los problemas que surjan, de este modo demostraremos de la pasta que estamos hechos y de si somos capaces o no de desempeñar nuestro trabajo. Se prudente, no te metas en lo que no vas a poder hacer. Es mejor decir de lo que eres capaz y de lo que no, así no te atribuirán responsabilidades que no vas a poder cumplir.
- Nadie es perfecto, por lo que si te equivocas lo mejor es reconocerlo, intentar enmendarlo y procurar no volverá meter la pata, se prudente y consciente de lo que tienes entre manos, así evitarás daños mayores. Si te has equivocado piensa en lo que ha pasado, busca el error y aprende de él: para superarse hay que levantarse de las caídas con la cabeza alta y la intención de hacer las cosas cada vez mejor.
- Tu sabes mejor que nadie cuando eres más productivo, por esto debes de calcular el tiempo y hacer los trabajos más pesados por difíciles cuando creas que estas más despejado y atento. Unas personas lo hacen por la mañana con la mente despierta y libres de preocupaciones, otros en cambio prefieren los atardeceres para enfrentarse a los retos.
- Se un buen compañero, no tengas problemas con los demás colegas, comunícate con ellos de una manera amena y amistosa, no seas orgullos ni pretencioso: la mejor manera de tener aliados en el trabajo es que no te tengan ni recelos ni envidias, se un buen compañero y todo estará a tu favor.
- No olvides hacer las tareas más importantes, se consciente de tu trabajo desde el primer momento, márcate unos límites en el tiempo y cumple las fechas acordadas, de este modo todos sabrán que eres una persona competente, que se puede confiar en ti porque cumples con lo establecido en el trabajo.
- No te estreses, el estrés es el peor enemigo de todo trabajador. Da igual el puesto que desempeñes, no importa si eres un empresario o el encargado de mantenimiento, todos los trabajos estresan. Para esto la solución es simple, relájate, busca tiempo libre y haz cosas que te distraigan y te gusten, olvídate del trabajo y procura dormir y descansar bien, tu cuerpo y tu mente lo agradecerán.
Para saber más, te aconsejamos nuestro artículo sobre el éxito laboral.