Nuestros clientes son la parte más importante de nuestro negocio
Si tenemos clientes satisfechos, sin duda conseguiremos que nuestro negocio crezca.
Además, tal como decía Philip Kotler “Los clientes satisfechos son la mejor publicidad para una empresa”. Si hablan bien, el boca a boca hará el resto.
Por ello es tan importante cuidarlos y gestionar de manera eficiente la satisfacción que recibe el cliente de nuestra empresa.
Para lograr esto hay que tener en cuenta varias claves y fijarnos en factores que hagan que nuestros clientes estén felices para que el negocio prospere.
Conocer bien a nuestro cliente
La oferta siempre debe tener como foco principal lo que nos demanda el cliente.
Si conocemos bien a nuestro cliente podremos plantear un buen marketing de cara a sus necesidades.
Atención personalizada
Aunque nuestro servicio al cliente tenga la misma dinámica para todos los clientes, debemos tener en cuenta a cada uno por separado.
Si hacemos sentir a cada cliente como si fuese único, nos ganaremos su respeto y además su fidelización.
El trato siempre debe ser amable, respetuoso, empático y rápido en la medida de lo posible.
Reconocer los errores
A la hora de atender quejas y reclamaciones, debemos tener en cuenta que toda empresa puede cometer errores, incluso la nuestra.
Siempre debemos ser amables y honestos. Además, debemos estar dispuestos a ofrecer servicios que normalmente no ofreceríamos, para que el cliente se sienta satisfecho.
Darle más de lo que pide
Por lo general, los clientes que deciden ponerse en contacto con nuestra empresa piden algo concreto.
Si además de lo que piden, somos capaces de ofrecerles algo más de lo que esperaban o de lo que le ofrece la competencia, tendremos clientes satisfechos.
Rodearnos de profesionales y seguir sus consejos
Si elegimos trabajar con profesionales cualificados y experimentados, evitaremos errores y agilizaremos muchos trámites.
También conseguiremos dar respuesta rápida a quejas o reclamaciones y… Tu cliente te lo agradecerá.
Cumplir, ser sinceros y nunca mentir
Si ofrecemos un servicio o un producto de calidad, debemos saber prestarlo. Si un cliente no está satisfecho, no volverá.
De la misma manera que si tu cliente está contento con tu empresa, tendrá más posibilidades de volver a elegirla.
Fidelizar clientes es menos costoso que captarlos
Atraer clientes nuevos requiere invertir más esfuerzos externos que intentar fidelizarlos. Emplea tus recursos para conseguirlo.
¡Conseguir clientes satisfechos está en tu mano!