Ventajas de una Oficina Virtual

La mayor ventaja de contar con una oficina virtual es que el coste de mantenimiento es casi simbólico si se compara con los gastos de una oficina física tradicional. Pero hay muchas más ventajas, como pagar por los servicios que realmente se utilizan.

Y aunque cuando se contrata un despacho virtual hay diferentes paquetes que responden a necesidades concretas de los diferentes tipos de usuarios, siempre es mucho más razonable el importe de la factura, que suele ser mensual.

Para toda una población creciente de trabajadores autónomos, emprendedores y ejecutivos que prescinden de espacios fijos con sus correspondientes gravámenes por los alquileres, una oficina virtual apenas representa nada en este aspecto. Con servicios estrella como el propio dominio y la atención de centralita personalizada, las empresas cuentan con despachos virtuales cada vez más.

Como abonar la factura del teléfono móvil, o la de cualquier otro gasto básico como el combustible para el vehículo, este servicio ha dejado de ser un gran escollo económico y un lastre inmobiliario. Los nuevos emprendedores, ejecutivos y trabajadores autónomos por cuenta propia, ven las ventajas evidentes de contar con un despacho en la nube. Pero también ciertas empresas con actividades cuya movilidad es grande y dependen siempre de estar conectados a internet.

Es cierto que esta fórmula de trabajo es cómoda, permite tener acceso a la actividad laboral de manera permanente y sin límites de localización, y es mucho más económica al eliminar costes fijos o inversiones de capital inicial.

Sin embargo, no todo el mundo se siente cómo trabajando sin establecer un contacto físico, consideran que su trabajo pierde efectividad o no saben organizarse. Esto sucede cuando la empresa aglutina a varios colaboradores pero algunos se adaptan a la fórmula online, mientras que otros no.

Lo que para algunos representa flexibilidad, otros pueden verlo como falta de coordinación y control. Quizá porque hay que saber organizarse más y mejor y ser algo más autónomo, cosa que no todo el mundo sabe ejercer adecuadamente. Eso sí, sin conexión a internet, es imposible trabajar, así que la dependencia de la red es total.

Algunas empresas pueden quejarse de que el servicio personalizado en los paquetes más básicos termina siendo despersonalizado. Y esto ocurre porque la atención a clientes se hace de manera estándar, lo cual hace resentirse la propia imagen de empresa y marca.

Por tanto, en algunos casos se ve aumentada la productividad cuando los tiempos perdidos entre desplazamientos y reuniones se han cedido al trabajo en sí mismo. El factor clima, los atascos o las incidencias domésticas dejan de ser tan dramáticos porque al estar en casa, la flexibilidad horaria permite seguir siendo productivos. En general, hay más ventajas que desventajas, luego es lógico que este servicio se extienda como una de las fórmulas más aceptadas.