Cómo promocionar nuestro producto o nuestros servicios es una de las decisiones más difíciles que debemos de afrontar a la hora de hacer realidad nuestra idea. Si nos paramos un segundo a observar nuestro alrededor, no tardaremos en descubrir que todas las empresas se han tenido que enfrentar en algún momento a esta cuestión.
Los carteles publicitarios, las marquesinas de los autobuses, la publicidad online y el Inbound Marketing son algunas de las estrategias que han estado o comienzan a estar más en forma que nunca. Y es que, por muy bueno que sea nuestro producto, si no somos capaces de comunicarlo, para el mercado es como si no existiera.
Si estás pensando en cómo promocionar tu producto y quieres crear una campaña publicitaria, te dejamos unos cuantos tips con los que posicionar tu producto en lo más alto del ránking.
Define tus objetivos
A la hora de vender nuestro producto, debemos de perseguir unos objetivos que, previamente, deben de haber sido marcados. Pese a que todo el mundo piense lo contrario, a la hora de promocionar un producto no siempre tiene que estar relacionado con aumentar las ventas del mismo, sino que pueden ser otros objetivos tales como darlo a conocer, posicionarlo en otro segmento del mercado o, simplemente, destacar por encima de la competencia.
Si no tenemos claro esta parte de la estrategia de marketing será complicado que logremos los resultados deseados.
Define tu target
Como siempre es habitual en este tipo de decisiones, tener claro cuál es el público al que nos queremos dirigir resulta vital a la hora de diseñar nuestra campaña de publicidad.
Aspectos tales como el lenguaje con el que comunicamos el producto o la manera en que presentamos el servicio deberá de adaptarse a nuestro público objetivo.
Si no tienes claro cuál es tu target, comienza tu campaña de publicidad definiéndolo.
¿Cómo te vas a promocionar?
Una vez tengas definido tu público y hayas delimitado tus objetivos, es importante que tengas claro cuál va a ser la forma con la que comunicar tu producto.
Del mismo modo que nuestro lenguaje debe de estar adaptado al público al que nos estamos dirigiendo, lo mismo ocurre con la vía a partir de la cual se va a transmitir información acerca de nuestros productos.
Si nuestro target es gente de la tercera edad, no tendrá sentido que nos centremos en internet; si queremos enfocarnos en el público más joven, quizá carezca de sentido que utilicemos las vías convencionales y nos centremos, por ejemplo, en las redes sociales.
Realizar una campaña de publicad y que ésta tenga éxito requiere de mucho esfuerzo, por lo que cuanto más focalizados estemos en perseguir nuestro objetivo, mucho más fácil será alcanzar los objetivos marcados previamente.
¿Y si hablamos del dinero?
La historia de la publicidad nos ha demostrado como, gracias a la viralidad, existen campañas de publicidad que con una inversión muy pequeña han obtenido resultados excepcionales y otras, con mucho más dinero invertido, no han logrado ni impactar en un tercio de la previsión.
Es importante que nos despojemos de la idea de que las campañas de publicidad tienen que ser caras. Si logramos definir una campaña de publicidad única, que nunca antes se haya visto, y tenemos suerte de que se haga viral, con un pequeño presupuesto lograremos una difusión inalcanzable sin importar del dinero que queramos gastarnos.
De la estrategia que realicemos de nuestra campaña de publicidad dependerá la consecución de nuestros objetivos. Realiza una buena planificación y haz que tu producto se posicione en un nivel superior, confía en la publicidad y conviértela en tu aliada, no te arrepentirás.
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